El Parque de la Quinta de los Molinos

El parque de la Quinta de los Molinos está considerado como uno de los parques más bonitos de Madrid. A partir de la última semana de Febrero y hasta la segunda semana de Marzo, es habitual que la gente acuda al mismo para ver uno de los espectáculos más bonitos que podemos ver en la capital: la floración del almendro.

En la actualidad este parque tiene una extensión de veinticinco hectáreas, divididas en dos zonas: al norte la zona de recreo (donde podemos ver un palacete de principios del siglo XX, un estanque, un molino y un edificio conocido como La Casa del Reloj) y al sur una zona más agrícola con almendros y olivos entre otros.

Además de ser un sitio excelente para dar un paseo y desconectar del ruido de la ciudad, el parque cuenta con una zona para mayores y un circuito biosaludable.

Los más pequeños tienen muy cerca un espacio donde pueden realizar actividades. Si bien no pertenece al parque, Espacio Abierto, es un centro cultural del ayuntamiento donde los niños de hasta dieciséis años pueden participar en talleres.

En la página del Ayuntamiento de Madrid a veces hacen itinerarios guiados y otro tipo de actividades como conciertos en Verano (asociados a los Veranos de la Villa).

Cómo llegar

El parque de la Quinta de los Molinos está situado en la calle de Alcalá 527. La entrada al mismo está justo al lado de la salida del metro Suanzes (Línea 5).

Puedes también llegar en autobús con las líneas 77, 104 y 105. El parque no dispone de zona de aparcamiento propia.

foto de como llegar a la Quinta de los Molinos
Como llegar a la Quinta de los Molinos. Plano de Google Maps

Horario

El parque está completamente cerrado, contando para el acceso con cinco puertas. Su horario de apertura va desde las 6:30 hasta las 22:00h durante todos los días del año.

Breve historia del parque

El parque de la Quinta de los Molinos está catalogado desde 1.997 como parque histórico. En sus inicios tenía una extensión de 28.7 hectáreas, llegando hasta nuestros días 25 hectáreas (en el resto se construyeron chalets de lujo).

Para entender su origen tenemos que remontarnos a las fincas de recreo que empezaron a aparecer desde mediados del siglo XVII hasta principios del XX.

Este jardín perteneció al Conde de Torre Arias, quien la regaló en el año 1920 a César Cort Botí (que era profesor de urbanismo en la escuela de arquitectura).

Este último construyó un jardín de tipo mediterráneo. A su muerte el parque quedó semiabandonado hasta que, en el año 1980, se llega a un acuerdo con el Ayuntamiento de Madrid que se termina quedando con las 25 hectáreas actuales.

Un paseo por la quinta

Como comentaba, el parque consta de cinco puertas y dos zonas bien diferenciadas. En la zona norte tenemos la zona de recreo (donde encontraremos el palacete, molinos, lago y Casa del Reloj) y en la zona sur la parte más agrícola (donde encontraremos las zonas para mí más interesantes para ver los almendros en flor).

La zona sur del parque. La parte más agrícola

En mi caso, he optado por iniciar la visita desde la zona sur, ya que está mejor comunicada. Sólo tenemos que salir del metro y entrar casi directamente al parque.

Nada más entrar al parque nos vamos a encontrar con un gran paseo que, si lo seguimos, nos llevará a la parte norte del parque (nos encontraremos con planos a lo largo de todo el camino).

paseo de entrada al parque
Paseo de entrada que nos encontramos al entrar

La zona que más me gusta del parque para ver los almendros en flor es la que queda a la derecha de la entrada, así que me desvío momentáneamente del camino principal para sacar unas fotos y disfrutar de los almendros florecidos.

Almendros en flor
Los primeros almendros que encontraremos en la visita
almendro en flor
almendro en flor
Flor del Almendro

La zona norte del parque. Diseñada para el recreo

Después de sacar unas fotos, volveremos al camino principal para seguirlo en dirección a la zona norte. Podemos separarnos momentáneamente para ver otras zonas de almendros o explorar alguna zona del parque que nos haya llamado la atención.

tunel
túnel

Estanque Grande

La idea de seguir el camino principal es porque nos lleva sin pérdida hacia la zona norte del parque, donde se encuentra la mayoría de edificaciones de interés. Si lo seguimos no tardaremos en llegar hasta el estanque más grande del parque.

estanque
estanque

Invernadero, Casa del Reloj y uno de los molinos

Un poco más arriba nos encontramos con una bifurcación. Tomaremos el camino de la derecha para visitar el invernadero, la Casa del Reloj y uno de los molinos del parque.

columna e invernadero
columna e invernadero
invernadero
invernadero desde uno de los laterales
molino y casa del reloj
molino y Casa del Reloj
aspa del molino
aspa del molino

Estanques Gemelos y fuente

Justo en frente del invernadero hay unas escaleras que bajan. Merece la pena que bajes un momento a ver los Estanques Gemelos y la fuente que hay entre ellos (en el momento de escribir esta entrada había pintores dibujándolos).

Fuente junto a los estanques gemelos
Fuente junto a los Estanques Gemelos

Palacio y fuente

¿Recuerdas que antes cogimos el camino de la derecha para ir a ver el invernadero, el molino y la Casa del Reloj? Pues ahora cogeremos el camino de la izquierda para ver el palacio y una fuente que hay en frente de este.

palacio de arquitectura prerracionalista
palacio de arquitectura prerracionalista de principios del siglo XX (ubicación actual de Espacio Abierto)
Fuente
Fuente en el jardín

Segundo molino, depósito y pista de tenis

Al lado del palacio hay otro molino, un depósito y una pista de tenis. En esta ocasión no me he acercado, pero merece la pena ya que estáis aquí que os paséis a verlo (así podréis decir que habéis visitado todas las zonas interesantes del parque).

Comentar que el agua con el que se regaba la finca procedía originariamente de pozos y manantiales pero, más adelante, se construyeron albercas y balsas de agua junto con fuentes que cumplían una función ornamental y de abastecimiento.

Camino de vuelta

De la calle Juan Ignacio Luca de Tena salen algunos autobuses, pero la frecuencia no es muy buena. Mi consejo es que si os sobra tiempo para volver (recordad que cierran el parque), lo hagáis siguiendo el camino principal de manera inversa.

Otra opción, que es la que seguí para escribir esta entrada, es mirar alguno de los carteles con planos y trazarnos un itinerario para volver. Por el camino podremos ver otras zonas de almendros y no se nos hará tan pesada la vuelta.

paseo volviendo al metro
Paseo volviendo al metro